Trucos de ortografía no sólo para escritores: diptongos e hiatos

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Hola. Como siempre digo, yo soy el primero que me equivoco y tengo fallos ortográficos. Precisamente por eso, para que entre todos podamos mejorar nuestra escritura, hago estas entradas en las que explico algunos de los fallos más habituales que se ven en muchos libros publicados. Y sí (siempre lo repito porque hay gente que llega por primera vez a mis consejos ortográficos a través de este concreto, así que tengo que reiterarlo aquí también), muchas de estas entradas también llevan o llevarán consejos útiles al hablar, de ahí lo de «no sólo para escritores» en el título. Y aclaro que sé que la RAE dice que sólo, cuando se usa como adverbio, se escribe ahora sin tilde, pero me temo que últimamente no estoy de acuerdo en todo con dicha institución y, ya sabéis, a veces las normas también están para saltárselas. Y ahora, a lo que veníamos:

DIPTONGOS E HIATOS

A mí, desde pequeño, los diptongos e hiatos siempre me dieron quebraderos de cabeza. Que no me entraban, oiga. Así que, como también afectan a las reglas generales de acentuación (de las que hablaré próximamente, porque mira que nos comemos o ponemos tildes incorrectamente al escribir), antes de hablar de estas quiero aclarar lo de los diptongos y hiatos (sí, la RAE acepta que usemos la y en este caso y en alguno más). Además, aclarar estos conceptos también puede venir bien a poetas a la hora de contabilizar sílabas.

Al lío. Diptongos e hiatos, decía. En ambos casos se trata de secuencias de vocales juntas. Pero, ¿cuál es la diferencia? La diferencia está en si se pronuncian en una o dos sílabas y alguna cosilla más que veremos a continuación.

DIPTONGO

En el caso del diptongo, las dos vocales se pronuncian juntas, en una sola sílaba. Es así de sencillo. Después veremos que en el hiato se pronuncian como dos sílabas distintas. Pero eso viene luego. Sigamos con el diptongo.

Vocales abiertas y cerradas

Para identificarlos (y también con los hiatos nos ocurrirá lo mismo) es bueno que sepamos cuáles son las vocales consideradas abiertas y cuáles las cerradas.

  • Vocales abiertas: A, E, O. Truco mnemotécnico: Yo, para acordarme, pienso en el prefijo AERO que relaciono con la aeronáutica y los viajes por el espacio abierto y, desde entonces, no se me olvida.
  • Vocales cerradas: I, U. Truco mnemotécnico: En este caso pienso en la onomatopeya de un silbido tal que así: FIUUUU, y como para silbar tengo que cerrar mucho los labios, se me queda en la memoria.

Estos trucos memorísticos que os pongo son útiles para que no tengáis que estar poniendo caras raras al pronunciar estas vocales tratando de averiguar si abrís mucho o poco la boca, pero si preferís hacer el ridículo cuando estéis en público y necesitéis saber si una vocal es abierta o cerrada, me parece perfecto.

Cómo identificar un diptongo

Ahora os va a resultar muy fácil identificar los DIPTONGOS con la siguiente clasificación:

  • Vocal abierta (a, e, o) + vocal cerrada (i, u). Por tanto, podríamos encontrarnos con los siguientes diptongos: ai, au, ei, eu, oi y ou. Pero no son los únicos.
  • Vocal cerrada (i, u) + vocal abierta (a, e, o). Al revés que el anterior caso, así que perfecto para memorizarlo. Veamos: ia, ie, io, ua, ue y uo. Y seguimos.
  • Vocal cerrada (i, u) + vocal cerrada (i, u). Aquí sólo tenemos dos: iu y ui. Y ya está.

Como veis es bien fácil: formamos diptongos poniendo vocal abierta con vocal cerrada o al revés, o bien escribiendo una vocal cerrada con otra vocal cerrada.

Acentuación en diptongos

En cuanto a la acentuación, los diptongos se ajustan a la regla general (que veremos en una futura entrada) para poner tilde o no. Sí es bueno que sepamos que en los casos en que haya que tildar, la tilde caerá sobre la vocal abierta. Y me preguntaréis qué pasa cuando el diptongo sea de dos vocales cerradas. Pues muy sencillo, se acentúa la segunda.

Ejemplos:

—No sé lo que queréis decir —replicó el cardenal—, y no quiero siquiera saberlo; pero tengo el deseo de seros agradable y no veo ningún inconveniente en daros lo que pedís respecto a una criatura tan ínfima; tanto más, como vos me decís, cuanto que ese pequeño D’Artagnan es un libertino, un duelista y un traidor.

Alejandro Dumas, Los tres mosqueteros.

En este fragmento de Los tres mosqueteros hay varios diptongos (y algún hiato que luego veremos). Vamos a verlos:
-Del primer tipo (abierta más cerrada) hay dos: queréis (que se tilda en la vocal abierta al ser aguda terminada en s) y traidor.
-Del segundo tipo (cerrada más abierta) hay varios: quiero, siquiera, inconveniente, criatura, cuanto y duelista.
-Del tercer tipo (cerrada más cerrada) no hay casos en este ejemplo, así que vayamos al segundo ejemplo:

Su corazón palpitaba, pero no era, como el de D’Artagnan, por un amor joven e impaciente. No, un interés más material le latigaba la sangre, iba por fin a franquear aquel umbral misterioso, a subir aquella escalinata desconocida que habían construido, uno a uno, los viejos escudos de maese Coquenard.

Alejandro Dumas, Los tres mosqueteros.

En este otro fragmento de Los tres mosqueteros vemos también varios diptongos (y también hay algún que otro hiato, por lo que también repetiremos la cita más abajo, cuando corresponda). Analizamos:
-Del primer tipo (abierta más cerrada): no hay casos en este ejemplo.
-Del segundo tipo (cerrada más abierta) hay tres: impaciente, misterioso y viejos.
-Del tercer tipo (cerrada más cerrada) hay uno: construido.

Iba sin duda el señor de Tréville a reprimir con vivas palabras aquella infraccn a las leyes de la etiqueta (…).

Alejandro Dumas. Los tres mosqueteros.

Vemos aquí la palabra infracción que es aguda. Aunque creo que todos tenemos claro que terminado en -ón se tilda, como en cabrón o mamón, en este caso que es una silaba compuesta por el diptongo io se acentúa y, como decíamos más arriba, en diptongos de vocal abierta y cerrada (da igual el orden) se pone la tilde en la abierta. En infracción se pone en la o y en queréis (por poner un ejemplo) se pone en la e que es la abierta. Podría parecer llana, aunque no debería parecerlo porque acaba en s, pero sigue siendo aguda.

Y entonces contó a sus amigos palabra por palabra lo que acababa de ocurrir entre él y su hsped (…).

Alejandro Dumas. Los tres mosqueteros.

Aquí, la palabra huésped contiene un diptongo que se acentúa por ser llana y no terminar en n, s o vocal y aplicamos la misma regla de antes: se pone la tilde en la vocal abierta.

Richeliu (…), y pensó por tercera o cuarta vez cuánto futuro tenía aquel muchacho de veintn años, y qué recursos podría ofrecer a un buen amo su actividad, su valor y su ingenio.

Alejandro Dumas. Los tres mosqueteros.

Para terminar con los diptongos, en esta cita de Los tres mosqueteros (pertenece todo al mismo párrafo pero lo he seccionado para no alargarlo en demasía) sólo voy a señalar los dos diptongos de vocales cerradas, que coinciden en ambos casos con iu. Lo encontramos en Richeliu que no precisa tilde por no ser palabra aguda, aunque acabe en vocal, y fijaos bien, lo encontramos en veintiún, donde se aplica la regla comentada anteriormente: si es un diptongo de ambas vocales cerradas y precisa tilde, esta se pondrá siempre en la segunda vocal. Otro ejemplo de esto, con la otra combinación de diptongo de ambas vocales cerradas (ui), sería la palabra casstica.

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HIATO

Si habéis leído hasta aquí sin que os dé una hernia de hiato os merecéis un premio. Pero como no hay presupuesto para ello, os tendréis que conformar con aprender a reconocer hiatos.

El hiato lo forman dos vocales consecutivas que se pronuncian en sílabas distintas.

Cómo identificar un hiato

Hay tres tipos de HIATO distintos:

  • Dos vocales abiertas (a, e, o) distintas. Serían ae, ao, ea, eo, oa, oe. Esto no tiene ninguna dificultad ni posibilidad de confundir con lo que habíamos visto de los diptongos, pues son combinaciones distintas a las de aquellos.
  • Dos vocales idénticas. Luego veremos unos ejemplos, pero también es un caso que no se puede confundir con los diptongos. Y hasta tiene la lógica de que si pones dos vocales iguales seguidas, debes pronunciar ambas y, por tanto, ha de tratarse de un hiato (a cada vocal le corresponde una sílaba).
  • Por último, una vocal abierta (a, e, o) seguida o precedida de una vocal cerrada (i, u) TÓNICA. Aquí, en lo de tónica, está el secreto para distinguirlo del diptongo, que también se conformaba con una combinación de vocal abierta y vocal cerrada. En el caso del hiato, la vocal cerrada (y sólo la cerrada) es tónica, es decir, se acentúa.

Acentuación en hiatos

En cuanto a ponerles tilde, los dos primeros casos (dos vocales abiertas distintas o dos vocales iguales) se acentuarán según las normas generales de acentuación. En el tercer caso SIEMPRE se pondrá tilde en la sílaba tónica, es decir, la cerrada.

Ejemplos de hiatos:

—No sé lo que queréis decir —replicó el cardenal—, y no quiero siquiera saberlo; pero tengo el deseo de seros agradable y no veo ningún inconveniente en daros lo que pedís respecto a una criatura tan ínfima; tanto más, como vos me decís, cuanto que ese pequeño D’Artagnan es un libertino, un duelista y un traidor.

Alejandro Dumas, Los tres mosqueteros.

En este fragmento repetido de Los tres mosqueteros destacamos un par de hiatos: deseo y veo.

Su corazón palpitaba, pero no era, como el de D’Artagnan, por un amor joven a impaciente. No, un interés más material le latigaba la sangre, iba por fin a franquear aquel umbral misterioso, a subir aquella escalinata desconocida que habían construido, uno a uno, los viejos escudos de maese Coquenard.

Alejandro Dumas, Los tres mosqueteros.

En este otro fragmento repetido de Los tres mosqueteros destacamos también un hiato muy ejemplificador del tercer caso de hiato, aquel en el que se acentúa con tilde la vocal cerrada que acompaña a la abierta, independientemente de que no se cumpla la regla general de palabra llana no terminada en n (este es el caso), s o vocal.

Richeliu (…), y pensó por tercera o cuarta vez cuánto futuro tenía aquel muchacho de veintiún años, y qué recursos podría ofrecer a un buen amo su actividad, su valor y su ingenio.

Alejandro Dumas. Los tres mosqueteros.

Traigo aquí otro fragmento repetido de Los tres mosqueteros para reforzar lo que ya habíamos visto en el anterior ejemplo sobre el hiato ia, en el que se tilda, obviamente, la vocal cerrada, que es la que hace que esto sea un hiato y no un diptongo.

Después, ebrios de alcohol y de violencia, se desvistieron y la desvistieron a ella.

(…)

¿Esperaban usarme como rehén para sacar algo a cambio?

(…)

Yabir, por su parte, levantaba las manos mientras se bañaba en loor de multitudes, como si hubiera sido él quien estuvo diseñando y escavando el túnel y la zanja que conformaban la obra recién inaugurada.

Sergio Reyes Puerta. Mursiyya; El talismán del Yemení.

Os creíais ya que no os iba a poner algún ejemplo de hiato formado por dos vocales idénticas. En este caso he dejado a un lado Los tres mosqueteros y he recurrido a una de mis obras, que contiene tres buenos ejemplos: alcohol, rehén y loor. Como se puede observar, en este tipo de hiatos (que pueden llevar h intercalada) son de aplicación las reglas generales para poner tilde. Rehén, aguda terminada en n… Etcétera.

Despedida y próxima estación…

Bueno, por ahora esto es todo. En una próxima entrada os hablaré de esas reglas generales de acentuación a las que me he ido refiriendo a lo largo de este artículo.

Hasta la próxima.

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