Náufrago (2017) – Microrrelato

Náufrago es un microrrelato que escribí en 2017 para una revista solidaria llamada Cinco palabras. Os recomiendo comprarla porque el dinero va destinado a acciones de desarrollo sin ánimo de lucro y podréis conocer a otros autores.

Ahí tenéis mi cuentito:

No es el único micro que publico en esta revista, podéis ver otro pinchando aquí.

Hasta la próxima.

Náufrago

Poco a poco, mientras miraba al horizonte anaranjado en aquel atardecer playero, le invadió la nostalgia de jardines y nenúfares en el estanque. De su risa cálida y contagiosa que adornaba las mañanas de domingo y alegraba las sobremesas de invierno. Del cuerpo desnudo y perfecto entregado a su pasión más desmedida, de los susurros seductores y sabios que le confiaba…

Poco a poco, mientras caminaba hacia aquel horizonte anaranjado, sumergiéndose paso a paso en ese mar bravío, en ese furioso Aqueronte, supo que muy pronto recuperaría todo aquello allá, al otro lado. Sí, por fin volverían a reunirse

Otra versión y la definitiva

Poco a poco, mientras miraba al horizonte anaranjado en aquel atardecer playero, le invadió la nostalgia de jardines y nenúfares en el estanque. De su risa cálida y contagiosa que adornaba las mañanas de domingo y alegraba las sobremesas de invierno, el cuerpo desnudo y perfecto entregado a su pasión más desmedida, de los susurros seductores y sabios que le confiaba…

Poco a poco, mientras caminaba hacia aquel horizonte anaranjado, sumergiéndose paso a paso en ese mar bravío, en ese furioso Aqueronte, supo que muy pronto recuperaría todo aquello allá, al otro lado. Sí, por fin volverían a reunirse.

Náufrago

Poco a poco, mientras miraba al horizonte anaranjado en aquel atardecer playero, le invadió la nostalgia de jardines y nenúfares en el estanque, de su risa cálida y contagiosa que adornaba las mañanas de domingo y alegraba las sobremesas de invierno, del cuerpo desnudo y perfecto entregado a su pasión más desmedida, de los susurros seductores y sabios que le confiaba…

Poco a poco, mientras caminaba hacia aquel horizonte anaranjado, sumergiéndose paso a paso en ese mar bravío, en ese furioso Aqueronte, supo que muy pronto recuperaría todo aquello allá, al otro lado. Sí, por fin volverían a reunirse.