Pensión completa – Paco Rabadán Aroca
Pensión completa
Paco Rabadán Aroca
RESEÑA
Paco Rabadán es un escritor del que llevaba oyendo hablar mucho tiempo (bien, por cierto). Sin embargo, hasta que este libro cayó en mis manos, no había tenido la oportunidad de leerlo. Y como en el momento que tuve la oportunidad de comprar su último libro estaba embarcado en la documentación de mi próxima novela y otras lecturas de carácter más serio, dramático, o como lo queráis llamar, opté por adquirir esta obra más lúdica y humorística, para refrescar un poquillo mis neuronas. (Aclaración: aunque he reseñado otras obras de este autor, la novela Pensión completa de Paco Rabadán Aroca es la primera suya que leí en su día. E, incluso, escribí esta reseña al terminarla, pero hasta ahora, por cuestiones de calendario, no la había podido publicar. En su lugar he ido colando en primer lugar las reseñas de otros libros suyos).
En Pensión completa de Paco Rabadán Aroca se nos plantea la situación de un individuo que nunca en su vida ha trabajado. Una especie de ni-ni de los que ahora proliferan por esta, nuestra sociedad. El muchacho en cuestión, que no tiene oficio ni beneficio, se encuentra de repente en la calle por la probablemente injusta (según él) decisión de su pareja. Entonces se ve obligado a buscar un lugar para vivir y donde le den de comer sin tener que invertir demasiado esfuerzo por su parte.
«Mi exnovia era de esas chicas chapadas a la antigua que todo lo que aspiran en la vida es a trabajar y fundar una familia. Hacen todo lo que ven, y el sueño que forma el eje central de sus vidas es tener lo mismo que los demás. Yo, sin embargo, soy un espíritu libre. Represento a ese tipo de almas que nadie puede encerrar en un cuerpo de carne y hueso, cuanto menos en un trabajo cualquiera, como ella siempre pretendió. De alguna manera sentía, y siento aún, que mi futuro profesional pasa por desarrollar una disciplina artística. Pero el problema es que el testimonio, la botella que debía contener el mensaje de mi vocación, estaba tardando mucho en llegar. Esto no era algo nuevo, dado que a muchos grandes artistas se les reveló su don muy tarde, algunos incluso durante la vejez. La persona no encuentra el arte, sino que el arte acaba encontrando a la persona. Yo debía seguir esperando».
Esta obra tiene una prosa sencilla y ligera, sin aspavientos rocambolescos, y con un tratamiento lineal del tiempo. Estas características se agradecen cuando quieres pasar un buen rato de lectura riendo y sin tener que pensar demasiado en ello. En su libro Rabadán nos muestra el sorprendente (y divertido) camino que este joven sigue en la consecución de su objetivo vital: vivir de puta madre sin dar un palo al agua.
«Antes, para ser un chorizo había que valer. Hacía falta tener un par de cojones para tirarse a la calle, navaja en mano, y atracar al personal, puesto que la cosa te podía salir mal y volverte a casa con dos hostias. Luego había que contar con la posibilidad de que te reconocieran y fueses a la cárcel para acabar convirtiéndote en la puta de todo el módulo en los días que tocara ducha. De una forma u otra te la jugabas. Pero ahora, cualquier niñato escondido en su casa te cuelga un estreno en la red y jode a un montón de gente que depende de la recaudación de la película para pagar la hipoteca y el colegio de sus hijos. El tema de Internet está convirtiendo en delincuentes a toda una generación y, lo que puede ser aún peor, en unos cobardes».
El autor nos cuenta, pues, las peripecias de Germán Chacón, que así se llama el protagonista, aunque pase gran parte de la novela suplantando la personalidad de otro individuo de apellido Padilla y nombre desconocido. Y con la excusa de contárnoslo el autor aprovecha para presentarnos un retrato de nuestra sociedad a través de un grupo de individuos bien seleccionados. Tanto que, incluso, podrían representar a nuestro país con un elevado nivel de acierto.
«Aunque no era del todo consciente de lo que había empujado a mi novia a echarme de su casa, me esforcé por aparentar aún más ignorancia para conseguir que se asomara al balcón y darle la pena suficiente para que reconsiderase su decisión. La pena, después de la fuerza bruta, es la influencia más poderosa que existe. Pero en mi caso resultó inútil. El corazón de mi pareja se había endurecido con el paso de los años. Yo era consciente de su ambiguo malestar, pero trataba de pensar en otra cosa cuando la alarma de mi conciencia aparecía para avisarme. Sus innumerables advertencias, que golpeaban mi cabeza como ahora lo hacían las gruesas gotas de aquella lluvia primaveral, eran esquivadas con bromas absurdas en un vano intento porque las señales que lanzaba acabaran siendo gracejos de los que nos reiríamos los dos. En cierta forma, le subconsciente se encargaba de ocultarme la cruda realidad de lo insostenible que se estaba convirtiendo nuestra relación. Ella hablaba muy en serio y muestra de ello es que pasó cerca de una hora sin que mostrar debilidad ante mi esperpéntica figura suplicándole que me permitiera facilitarle una explicación que, por otra parte, no tenía muy claro qué contenido darle».
Nos sumergimos así en un retrato coral y algo grotesco (a la par que divertido) de la España actual, con especial incidencia en nuestro sistema sanitario. Y, por qué no decirlo, en otros como el penitenciario.
Pensión completa de Paco Rabadán Aroca es una novela de humor (con lo difícil que es este género, la verdad) que te arrancará muchas sonrisas y, probablemente, un buen número de carcajadas. No dudes en leerla. ¡Ah! Puedes conseguirla pinchando aquí.
Ficha técnica:
Editorial: Ediciones libro azul
ISBN: 978-84-1208-020-9
Edición: Primera edición
Formato: Papel
Género: Novela de humor
Traducción: No procede