Bajo la piel de Susana Rodríguez Lezaun

Bajo la piel

Susana Rodríguez Lezaun

RESEÑA

Ambientada entre Pamplona, Zugarramurdi y Biescas, la primera novela que leo de esta autora me ha gustado mucho. Empiezo así de contundente porque necesitaba decirlo, soltarlo y compartirlo con todos vosotros. En esta obra, que no será la única que lea de esta autora, la inspectora Pieldelobo se enfrenta a un caso complicado que se le envenena. Un caso que le traerá muchos problemas. Y sí, la novela es negra, muy negra. Es más: es mucho más que negra. No voy a destriparos nada de Bajo la piel, pero vamos al lío ya mismo para que entendáis a qué me refiero.

 

Una narrativa sorprendente

Efectivamente, la narrativa que conduce la trama me ha resultado sorprendente en una novela negra / thriller. Para bien, por supuesto. Porque no es sólo la investigación, la técnica policial (que demuestra conocer muy bien) o los escenarios ante los que nos sitúa. También es cómo refleja el mundo interior de la protagonista, sus conflictos más personales, sus sensaciones y emociones más íntimas. Además, hay algo en esta obra que suele dejarse más de lado en el género aludido, para primar elementos como la acción y el misterio. Sin embargo, Susana, sin abandonar estos preceptos y otros igual de fundamentales, nos transporta más allá gracias a la personalidad de Marcela Pieldelobo. Los datos que la inspectora maneja en su friki-cerebro y algunos de sus planteamientos no pueden dejaros indiferentes. Os pongo un ejemplo:

«Puedes ver una ola. Puedes medir su anchura, el alto de su cresta. Ves el sol refractarse en la espuma. Calculas la velocidad a la que avanza y te asombras ante su majestuosidad. Luego, en un momento, llega a la orilla y se deshace. Desaparece. Pero no del todo, porque la ola es agua, y como agua regresa al mar, que hará con ella lo que quiera. Podrá enviarla a lo más profundo del océano, o calentarse y unirse a una corriente marina que recorra el mundo. Podrá evaporarse y convertirse en lluvia o, por qué no, ser una nueva ola.

A Marcela le gustaba esa interpretación budista de la muerte, sobre todo porque no mencionaba a ningún dios ni hacía referencia al alma, el cielo o el infierno. Se limitaba a explicar con cristalina claridad que somos lo que somos, y en un momento dejamos de serlo para unirnos a algo más grande, algo que puede ser la nada, eso nadie lo sabía. Le gustaba la idea de la unión de la energía , del reencuentro de todas las gotas en el mismo mar».

Así, con una narrativa muy propia y personal, nos introduce en un complejo caso, sí, pero también nos trae la vida. Nos enseña lo que está más allá del trabajo de la inspectora, nos hipnotiza con personajes entrañables como Antón. También nos invita a enamorarnos de sus protagonistas y de Navarra. Y, como no podía ser de otra forma, nos seduce con la pluma.

La ambientación de Bajo la piel

La periodista Susana Rodríguez de Lezaun se luce en la prosa de Bajo la piel y nos traslada a diversos lugares como si estuvieras allí. Yo, que nunca he estado en los principales escenarios de esta obra, me siento ahora mismo como si los conociera. Como si pudiera plantarme allí mañana mismo y pasear por las calles descritas tal como alguien que fuera paisano del lugar de toda la vida. Y no solo ambienta y te muestra a los ojos las ciudades: también los locales, las relaciones y hasta los paisajes. Además, en pocas novelas he activado como en esta todos mis sentidos. Susana me ha hecho sentir bajo la piel, pero también sobre ella. He notado el tacto, las texturas y los sabores y he oído los ruidos y sonidos característicos de cada situación. ¡Hasta he escuchado el silencio cuando procedía!

«Tenía un nudo enorme en la garganta, una bola difícil de deshacer e imposible de tragar. Le habría encantado contar con el asidero de la religión, con el consuelo del rezo y de la promesa de la vida eterna, pero no era así. Su corazón sólo era una víscera más y sabía que los veintiún gramos que la creencia popular aseguraba que perdía un cuerpo al morir no era el alma iniciando su viaje hacia el más allá, sino el último soplo de aire que le quedaba al desgraciado que acababa de perder la vida».

El caso en Bajo la piel

Si lo leéis descubriréis que Pieldelobo no se enfrenta a un caso cualquiera. Las características del mismo engancharán al lector al sofá o el sillón, tal vez a la cama, y querrá saber más y más según vaya leyendo. El olfato policial de Marcela la hará sospechar e indagar en los ambientes necesarios para su resolución. Tendrá que enfrentarse a grandes dificultades mientras va desnudando lo que hay bajo la piel de la víctima, de la protagonista y compañeros y de los sospechosos. Y habrá de buscar la manera de sortear las limitaciones legales que le impiden avanzar en su investigación. Sin duda, un cóctel que te atrapará hasta la última página.

«Había conseguido salir de la comisaría sin llamar la atención. No tenía ningún plan más allá de entrar en un bar en el que no la conociera nadie, ponerse los auriculares para alejar a cualquiera que tuviera intención de darle conversación y comer y beber hasta que la rabia que le hervía en el estómago dejara de borbotear. Sabía que serviría de poco, que en unas horas la furia regresaría, pero por algún sitio había que empezar. Odiaba la política, la falsedad y los matrimonios de conveniencia entre personas, partidos e instituciones.

Yo te rasco y tú me rascas. Qué asco».

Resumiendo

No me quiero extender más que luego me salen reseñas muy largas. Así que corto aquí y os resumo mis principales impresiones:

Libro altamente recomendable, incluso si la novela negra no es lo tuyo, ya que el componente narrativo fluye más allá del mencionado género y te sorprenderá. Una obra cuidada en la que la autora está pendiente de los detalles y juega con todos nuestros sentidos. Una historia que engancha.

Ay, no sé de dónde voy a sacar el tiempo, pero me he propuesto leer más libros de esta escritora, así que qué os voy a decir sobre Bajo la piel. ¡Que no dudéis en leerla! ¡Será un acierto!

Ficha técnica:

Editorial: Harper Collins

ISBN: 978-84-9139-559-1

Edición: Primera edición

Formato: Papel

Género: Novela negra, policiaca, thriller.

Traducción: No procede

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